Nació en Figueres (Girona) en 1904, en el seno de una familia de la burguesía catalana. En 1916 pasa una temporada en la finca El Molino de la Torre, propiedad de la familia Pitxot –familia de intelectuales y artistas– donde, a través de la colección que poseía uno de sus miembros, el pintor Ramón Pitxot, descubrió el impresionismo.
En 1919 participó, por primera vez, en una exposición colectiva celebrada en la Sociedad de Conciertos de Figueres. Con un grupo de amigos del instituto fundó la revista Studium, donde publicó sus primeros escritos: una serie de artículos sobre figuras universales de la pintura como Goya, El Greco, Durero o Leonardo da Vinci.
En 1922 asiste a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid. En la Residencia de Estudiantes de esa ciudad conoce a Luis Buñuel y a Federico García Lorca, con los que entabla una estrecha y fructífera amistad. Durante el curso académico 1923-24, Dalí fue expulsado por declarar públicamente la incompetencia de sus profesores y regresó a Figueres. Un año más tarde expuso individualmente por primera vez en la Galería Dalmau de Barcelona.
En 1926 realizó su primer viaje a París, donde conoció a Picasso. Un año después, Dalí colaboró con diversas revistas especializadas, como L’Amic de les Arts, y diseñó los decorados y vestuarios de la obra teatral Mariana Pineda, de Lorca. En 1928 participó en la 27ª Exposición Internacional organizada por el Carnegie Institute de Pittsburgh. Publicó, con Lluis Montanyà y Sebastià Guasch, el Manifest groc, un duro ataque al arte convencional.
En enero de 1929 escribe con Buñuel el guion para Un Chien Andalou, película rodada en París en abril del mismo año. En la capital francesa, Miró lo pone en contacto con el grupo de surrealistas encabezado por André Breton. Conoce a Tristán Tzara, René Magritte, Hans Arp y Camil Goemans, quien sería su marchante. Ese verano recibió en Cadaqués la visita de un grupo de amigos de París entre los cuales se encontraban Paul Éluard y su esposa Gala, la cual abandonó a su marido y ya no se separó de Dalí.
En 1930 escribió La Femme visible que incluía el texto L’Ane pourri, donde explicaba su método paranoico-crítico: la construcción de escenas oníricas a base de la combinación de elementos reales perfectamente reconocibles. Aparecen en su obra una serie de elementos que serán una constante en este periodo: los paisajes oníricos de Cadaqués, las muletas, la figura del león y los caballos, las formas putrefactas y reblandecidas que acompañan elementos escatológicos y de componente sexual y, sobre todo, su autorretrato formado por una enorme langosta rodeada de hormigas. Alcanza su madurez como artista, abandona toda influencia anterior del Picasso clásico y de Giorgio de Chirico para crear un estilo enormemente personal.
Ese mismo año se estrenó en París, con gran escándalo, L’Âge d’Or, segundo film realizado en colaboración con Buñuel. Por entonces la carrera de Dalí parecía imparable. En 1932 participó en una exposición colectiva surrealista en la Galería Julien Levy en Nueva York, aunque por temor no viajó hasta Norteamérica, y al año siguiente presentó sus obras surrealistas en Barcelona, en la Galería d’Art Catalonia. En 1934 realizó su primera exposición individual en Londres, en la Zwemmer Gallery, y, finalmente, rompe con Breton y los surrealistas. Ese año también viajó con Gala a Nueva York para presentar una exposición organizada por la Editorial Albert Skira donde se mostraban cuarenta y dos aguafuertes y treinta dibujos realizados para Los cantos de Maldoror.
En 1936 participó en la Exposición Internacional del Surrealismo en Londres y en la titulada Arte Fantástico, dadá y surrealismo en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Dalí había comenzado a hacerse notar en los ambientes artísticos neoyorquinos, para lo cual había echado mano no solo de su obra pictórica, sino también de su capacidad de provocación y de una cuidada puesta en escena. Ante el estallido de la Guerra Civil, Dalí decidió instalarse en París. Allí vivió la invasión alemana, y se trasladó después a Estados Unidos, donde residió ocho años.
En 1941 estrenó en Nueva York, en colaboración con Léonide Massine, el ballet Laberinto. En ese mismo año se presentó en el Museo de Arte Moderno de Nueva York su primera gran retrospectiva. En 1942 publicó su autobiografía Vida secreta de Salvador Dalí, que levantó una enorme polémica –unida a un gran interés– por sus escandalosas confesiones. Esta obra estuvo prohibida en España hasta la democracia y finalmente se editó en 1981. Hasta entonces únicamente circularon por el país seis solicitadísimos ejemplares procedentes de Sudamérica.
En 1945 realizó los decorados para el film Recuerda, de Alfred Hitchcock, y al año siguiente empezó a trabajar con Walt Disney en un proyecto inacabado llamado Destino. En 1948 publicó 50 Secretos mágicos para pintar y se estrenó en Roma Rosalinda o Come vi piace, de Shakespeare, con vestuario y decorados diseñados por el artista y dirigida por Luchino Visconti. Tras la colaboración italiana regresó a Port Lligat, donde comenzó a orientar su obra hacia un nuevo clasicismo, que denominaría como su etapa mística y nuclear. Esta se inició con el estallido de la bomba atómica de Hiroshima y se caracterizaba por la disgregación de formas en partículas que mantenían una prudente distancia sin llegar a tocarse. «Si los físicos producen antimateria, les está permitido a los pintores, ya especialistas en ángeles, pintarla. Durante el periodo surrealista he deseado crear la iconografía del mundo interior, el mundo maravilloso, de mi padre Freud; lo he logrado. En la actualidad, el mundo exterior –el de la física– ha trascendido al de la psicología. Mi padre hoy es el doctor Heisenberg», afirmó el artista.
Poco después decidió regresar a Figueres. El recibimiento que tuvo en la España nacional católica fue frío y hostil, opuesto al tratamiento recibido en Norteamérica. A Dalí le costó acostumbrarse a no ser el centro de atención y aceptar que su regreso no era celebrado diariamente por los medios de comunicación. Sin embargo, la nueva tendencia católica de su arte, entonces más sosegado e infinitamente menos provocador, contribuyó en una paulatina y velada aceptación oficial.
En 1949 se estrenó en el Teatro Nacional María Guerrero de Madrid Don Juan Tenorio, de Zorrilla, con vestuarios y escenarios de Salvador Dalí. En 1951 publicó su Manifiesto Místico, en el que se declaraba católico sin el don de la fe. En esta década se percató de la demanda de obras de temática religiosa, por lo que comenzó a pintar al menos un gran lienzo religioso al año, a menudo excelentemente pagado por su mecenas. En esta época creó la Madonna de Portlligat o el Cristo de San Juan de la Cruz. Tres años más tarde comenzó el rodaje de L’Aventure prodigieuse de la dentellière et du rhinocéros, un animal cuyo cuerno le obsesionaría durante un periodo.
Los últimos treinta años de la vida artística de Dalí fueron de lenta decadencia, a la vez que atendía menos encargos. En los años sesenta se interesó por la holografía y empezó a profundizar en la tercera dimensión. Hacia 1961 se empezó a hablar de transformar el Teatro Municipal de Figueres, incendiado durante la Guerra Civil, para convertirlo en el Teatro-Museo Dalí. En 1963 publicó El mito trágico del Ángelus de Millet cuyo manuscrito permaneció extraviado durante veintidós años. Entre 1964 y 1965 le dedicaron dos grandes retrospectivas: la primera en Tokio y la segunda en Huntington Hartford’s Gallery de Nueva York. En 1964 publicó Diario de un genio, que había empezado a escribir en 1952, y, en 1969, Las metamorfosis eróticas.
Tras diez años de negociaciones con el ayuntamiento de Figueres, en 1970 se anunció la creación del Teatro-Museo Dalí, el cual se inaugura el 28 de septiembre de 1974. En 1973 se inauguró el Salvador Dalí Museum de Cleveland, que en 1982 fue trasladado a San Petersburgo (Florida). En él se reúne una importante muestra de su producción, así como obras de algunos de sus pintores preferidos (El Greco, Meissonier, Bouguereau, Fuchs, Fortuny o Pitxot). En 1975 presentó la primera parte de su película Impresiones de la Alta Mongolia-Homenaje a Raymond Roussel.
En 1978 fue nombrado miembro asociado extranjero de la Academia de las Bellas Artes del Institut de France. En 1979 se exhibió una gran antológica en el Centre Pompidou de París y, en 1980, en la Tate Modern de Londres.
El 10 de junio de 1982 muere Gala y Dalí se traslada a vivir al Castillo de Púbol. En ese mismo año es nombrado Marqués Dalí de Púbol. En 1983 se celebró la exposición antológica 400 obras de Salvador Dalí de 1914-1985 en Madrid, Barcelona y Figueres. Sus últimas obras pictóricas datan de este periodo.
En 1984, a causa de un incendio en el Castillo de Púbol, trasladó su residencia definitivamente a la Torre Galatea, donde vivió hasta su muerte, el 23 de enero de 1989.